Recuerdo que cuando Yehude fue elegido premier, eran muchas las voces desde la izquierda, desde varias oeneges, y desde algunos movimientos sociales, que decían que con Yehude habría un acercamiento al gobierno, que repetían que Yehude si respetaba los DDHH, que mencionaban que probablemente el autoritarismo del gobierno seria detenido, o al menos paliado. Algunos y algunas, nos mantuvimos escépticos al respecto, ya que en los últimos años, Yehude había demostrado un alejamiento de su antiguo entorno, un acercamiento al APRA, y un claro giro hacia la derecha.
En estos días, definitivamente las y los escépticos no nos hemos sorprendido como si lo deben haber hecho otros y otras. EL señor Yehude ha firmado, junto a su socio Alan, un proyecto de ley mediante el cual se le pide al Congreso de la Republica, con carácter de urgente, modifique el Código Civil y la Ley General de Sociedades
En una continuación de la política represora, intolerante y autoritaria del APRA, ahora, con las modificaciones propuestas, se intenta obtener el medio para que el Poder Ejecutivo tenga la potestad de disolver (Palabra conocida, ¿no?) Asociaciones de la sociedad civil, oeneges, sindicatos, federaciones, etc, e increíblemente, hasta empresas privadas. Esto último, obviamente incluiría los medios de comunicación.
El documento presentado, que incluye las modificaciones (justificaciones para tales “disoluciones”), están en el archivo del enlace, así como los ¿motivos? para solicitar tales modificaciones a las leyes mencionadas:
Enlace
Este proyecto de ley nos sigue demostrando que el actual gobierno no soporta ni un indicio de posición, que su política liquidadora contra los y las defensoras de Derechos Humanos, contra los y las militantes de izquierda, y contra los (pocos) medios de comunicación opositores contunuara. Los objetivo del proyecto de ley son claros: Primero las “Casas del ALBA”, por el supuesto peligro (no explicado aun) que representan; segundo los frentes regionales, sindicatos (CGTP, CUT, federaciones menores, etc), y similares (CCP); tercero, los medios de comunicación de que nos son “sobones” del gobierno (recuerden que varias radios de provincia ya han sido cerradas), siendo seguramente la prioridad el diario “La Primera”, y continuar cerrando (mas) radios de provincia. En cuarto lugar, y sin dudas, están la oeneges, a las cuales el gobierno y sus aliados (fujimoristas, los militares corruptos o culpables de delitos, etc) consideran sus enemigos (IDL, APRODEH, etc).
Probablemente, de aprobarse dicha ley, el gobierno no la use de forma automática, pero, ahí la tendrán, como su “As bajo la manga”, buscando allanar el camino al 2011 para uno de sus aliados (¿Kouri?, ¿Castañeda?, ¿Giampietri?...) y por sobretodo, dejar el camino listo para el 2016 para la re-re-re-elección del siempre egocéntrico, intolerante y autoritario Alan García.
Pero, ¿esperábamos otra cosa de García?, por supuesto que no. Y, ¿esperábamos otra cosa de Yehude?, creo que algunos y algunas dirán que si, otros y otras, por suerte, podremos decir que no.
En estos días, definitivamente las y los escépticos no nos hemos sorprendido como si lo deben haber hecho otros y otras. EL señor Yehude ha firmado, junto a su socio Alan, un proyecto de ley mediante el cual se le pide al Congreso de la Republica, con carácter de urgente, modifique el Código Civil y la Ley General de Sociedades
En una continuación de la política represora, intolerante y autoritaria del APRA, ahora, con las modificaciones propuestas, se intenta obtener el medio para que el Poder Ejecutivo tenga la potestad de disolver (Palabra conocida, ¿no?) Asociaciones de la sociedad civil, oeneges, sindicatos, federaciones, etc, e increíblemente, hasta empresas privadas. Esto último, obviamente incluiría los medios de comunicación.
El documento presentado, que incluye las modificaciones (justificaciones para tales “disoluciones”), están en el archivo del enlace, así como los ¿motivos? para solicitar tales modificaciones a las leyes mencionadas:
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Este proyecto de ley nos sigue demostrando que el actual gobierno no soporta ni un indicio de posición, que su política liquidadora contra los y las defensoras de Derechos Humanos, contra los y las militantes de izquierda, y contra los (pocos) medios de comunicación opositores contunuara. Los objetivo del proyecto de ley son claros: Primero las “Casas del ALBA”, por el supuesto peligro (no explicado aun) que representan; segundo los frentes regionales, sindicatos (CGTP, CUT, federaciones menores, etc), y similares (CCP); tercero, los medios de comunicación de que nos son “sobones” del gobierno (recuerden que varias radios de provincia ya han sido cerradas), siendo seguramente la prioridad el diario “La Primera”, y continuar cerrando (mas) radios de provincia. En cuarto lugar, y sin dudas, están la oeneges, a las cuales el gobierno y sus aliados (fujimoristas, los militares corruptos o culpables de delitos, etc) consideran sus enemigos (IDL, APRODEH, etc).
Probablemente, de aprobarse dicha ley, el gobierno no la use de forma automática, pero, ahí la tendrán, como su “As bajo la manga”, buscando allanar el camino al 2011 para uno de sus aliados (¿Kouri?, ¿Castañeda?, ¿Giampietri?...) y por sobretodo, dejar el camino listo para el 2016 para la re-re-re-elección del siempre egocéntrico, intolerante y autoritario Alan García.
Pero, ¿esperábamos otra cosa de García?, por supuesto que no. Y, ¿esperábamos otra cosa de Yehude?, creo que algunos y algunas dirán que si, otros y otras, por suerte, podremos decir que no.
1 comentario:
Cual es la necesidad de ser opositor?.
Cual es la necesidad de cambiar de "- ismo" (socialismo, capitalismo, comunismo, etc)?
Cual es la necesidad afinarse a un partido/movimiento para polarizar las situaciones?
¿Que son las casas del alba?.
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